sábado, 15 de noviembre de 2014

DE NUEVO LA CAMPANA MARÍA VALERA CON NOSOTROS

 
                                               LAUDO DEUM VERUM ( alabo al Dios verdadero )
                                               PLEVEN BOCO              ( exorto al pueblo )
                                               CONGREGO CLERUM  ( congrego al clero )
                                               DEFUNTO PLORO         ( lloro a los muertos )
                                               PRESTEM FUGO            ( huyo de la peste )
                                               DEMONIA EJICIO          ( expulso a los demonios )
                                               FESTA DECORO            ( honro a las fiestas )
                                          
                                            MARÍA VALERA VÁRBARA DEL SACRAMENTO AÑO 1851
                            REFUNDIDA POR AYUNTAMIENTO DE LA CODOÑERA EN EL AÑO 2014

   Así reza en la actual campana María Valera, refundida y réplica de la anterior. Esta campana es uno de los iconos más emblemáticos que simbolizan el carácter e historia de La Codoñera. Su estela es el gran fulgor que llega para ilusionar las vidas. Su impronta en el aire lanza aquella libertad silvestre y de palomas. Eleva la energía entre los hombres a la paz y a la velocidad de la alegría. Conductora de sonido y de alas. Tocais al sol, al aire y a las personas. Sois el temblor del vuelo; y el viento se estremece con tu voz. Congregais al pueblo, anuncias la hora, y constatais el paso de la historia.
El 5 de agosto de 2014 fue un día" importante" para el municipio, la campana María Valera de la Iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, se bandeó como muestra de júbilo y tradición, tras la refundición a la que había sido sometida.
La campana anterior fue bajada del campanario el pasado 15 de mayo, día de San Isidro, para llevarla a la Puebla de Alfindén ( Zaragoza ) y refundirla. "Presentaba una grieta muy grande que impedía el sonar bien, tampoco se podía bandear desde hacía cuatro años". Cabían dos opciones: Refundirla o reparar la grieta en Holanda. Se optó para mayor seguridad refundirla y así evitar el riesgo de que quedara mal.
El acto de bendición llegó cerca del mediodía, precedido por una misa. Decenas de personas se congregaron en la plaza de la Iglesia para ovacionar la entrada de la campana portada por un camión. Una grúa sirvió para bajarla al suelo y efectuar su bendición, después alzarla al campanario para gozo y alegría de los presentes, dado su estado nuevo y brillante.
A las siete de la tarde se produjo con emoción, el acto que todos estaban esperando:el primer bandeo de la campana.Un vino español, y el bandeo a mano pusieron el sabor final a una jornada que será recordada por los codoñeranos.
La refundición se ha prolongado durante dos meses y medio. Los trabajos han consistido en llevar al estado líquido, añadiéndole de más 140 Kilos de estaño y bronce, con una combinación del 20% y el 80% respectivamente.
La anterior campana pesaba 968 Kilos. La tradición popular decía:" María Caspe me llamo, 33 quintales peso, el que no se quiera creer que venga y que lente mi peso".
La campana actual pesa 1108 Kilos. Todo el contrapeso es de madera tropical de hiroco. El badajo es de nylon. Se ha instalado un sistema automático para bandear a mano y automáticamente.
El ayuntamiento expondrá tanto el yugo, como el contrapeso anterior, que en su interior alojaba cinco balas de cañón.
Rolojes Pallás, de la Puebla de Alfindén ( Zaragoza ), es la empresa encargada de todo el trabajo, que también fue la que automatizó el reloj con un coste 23.490euros.

                                   LAS CAMPANAS DE LA CODOÑERA

   El 11 de diciembre de 1400, en una instrucción del Arzobispo de Zaragoza dice: "El Arzobispo Don García, a sus queridos en Cristo los jurados y honrados hombres del lugar de La Codoñea en la Diócesis, Salud en el Señor, como quiera que humildemente habeis hecho de nuevo una campana para el servicio de la iglesia de dicho lugar, que quereis colocar en el campanario y nos habeis suplicado de una pequeña campana que hay en dicho campanario en cuyo lugar la nueva campana y colocar la pequeña en la ermita de Santa Bárbara, sita en el término de dicho lugar para servicio de dicha ermita, nos habeis solicitado concederos permiso par trasladar dicha pequeña campana del campanario de la iglesia parroquial y colocarla en la ermita de Santa Bárbara, por los presentes os concedemos dicha licencia, queremos que dicha pequeña campana no se saque de la iglesia parroquial hasta que la nueva campana haya sido colocada en el campanario." Por dicha licencia se pagaron 3 sueldos y 4 dineros. ARCHIVO DIOCESANO DE ZARAGOZA. Registro de Actos Comunes, año 1400, folio 237 en latín.
El 16 de septiembre de 1766 fue llamado el maestro campanero de Vizcaya, Antonio Mier, para que fabricara dos campanas por el precio de 3 libras de aceite de 12 onzas la libra por molada del molino de aceite hasta abonar el importe total de 1374 libras. ARCHIVO DE PROTOCOLOS NOTARIAALES DE ALCAÑIZ. Registro 1011, folio 101 del notario Cosme Faci Agud.
En la visita pastoral del Arzobispo D.Agustín de Leza Palomeque efectuada el 22 de junio de 1788, consta que la iglesia de La Codoñera disponía de un campanario bueno y firme con cuatro campanas, tres de ellas corrientes, así como un cimbalico o campana pequeña sobre el tejado de la iglesia para llamar a los vecinos.
En el informe de la Visita Pastoral de 1848 mencionaba que la torre tenía tres campanas, pero la mayor estaba inútil y sólo servía para el reloj, de 30 quintales de peso.En el año 1848 se fundió la campana mediana, "Mitjaneta", que pesaba de 16 a 20 arrobas. Encima de la iglesia había un segundillo para llamar a los fieles a la misa rezada. La campana mayor, había quedado inutilizada durante la primera guerra carlista, y se acordó fundirla para fabricar otra nueva. Según la tradición oral se aprovecharon en la cuesta de la Balsata, al "verché de la tía  Corsetera" para fundirla, quedando terminada para la festividad del Corpus. Como paso previo el párroco Andrés Esteban, solicitó y obtuvo del Arzobispado la autorización para su bendición según el Ritual Romano el 6 de junio de 1851. Su peso, con el metal añadido, era de 80 libras, semejante a la anterior y se la bautizó con el nombre de:"María, Valera, Bárbara del Sacramento", popularmente conocida como la "Valera". Su coste fue de 2.000 reales de vellón que satisfizo el Ayuntamiento con sus fondo y los árbitros del pueblo, según acta levantada en el Libro de Jocalías de la parroquia el 20 de junio de 1851. En el año 1856 fue necesario componer los badajos de las tres campanas. En 1881 se efectuaron obras de mantenimiento en el campanario de la iglesia.
A finales del siglo XIX, había tres campanas señalando los puntos cardinales, "La Valera" fue la de mayor tamaño, orientada hacia oriente. "La Miitjaneta o Sargantanera", dirigida hacia Torrecilla, se empleaba para tocar los cuartos para la misa. "Lo Cimbalet", anunciaba el toque de la misa diaria y los entierros de los niños.
Durante la Guerra Civil de 1936-1939, la falta de matales para fabricar armas fue esgrimido como motivo para desmontar las campanas de la mayor parte de los pueblos. El 26 de noviembre de 1937 se bajaron las campanas, la "Mitjaneta o Sargantanera y lo Cimbalet", que junto con las de Santa Bárbara, la del Calvario y la de la Capilla, fueron cargadas en camiones para ser fundidas, sólo quedó la "Valera" por su gran peso y volumen. En marzo de 1938 la parte del campanario situada debajo de las campanas fue dañada por el fuego de la artillería, lo que exigió su reparación al finalizar la contienda. En septiembre de 1943, se compró una campana para la ermita de Santa Bárbara, que fue costeada por los vecinos.
Después de arreglar el campanario, el 7 de noviembre de 2005 se mecanizaron las campanas a cargo de empresa:"Relojes Pallás, S.L." de la Puebla de Alfindén ( Zaragoza ). El coste del trabajo ascendió a 3.602 euros, una parte fue aportada por el vecino Enrique Bosque y el resto el Ayuntamiento. El 10 de diciembre, festividad de la Purísima, fue bendecida por el párroco José María Andreu.

                                            EL LENGUJE DE LAS CAMPANAS 

   Los diferentes toces de las campanas constituían un lenguaje de signos que los vecinos identificaban rápidamente. Con ellos se solemnizaban las principales manifestaciones civiles y religiosas, pero también constitían un eficaz medio para advertir a la población de potenciales amenazas y peligros. Además, su tañido permitía orientar a los viajeros que pudieran desorientarse por causa de la niebla y mal tiempo.
Las tormentas eran cojuradas por el sacerdote mediante exorcirmos desde lo alto del campanario. El tañido de las campanas se creía que tenían el poder de desviar las tormentas de sus trayectorias y el granizo no dañara los cultivos. Esta tarea revestía un iimportante riesgo para el campanero por la elavada frecuencia con que caían los rayos sobre los campanarios, el primer pararrayos no se colocó hasta el año 1884.
En aplicación de la creencia en el poder de las campanas, éstas volteaban intensamente con motivo del devastador huracán conocido como la "Sierpe de Valdealgorfa", que desató el 11 de junio de 1748 y que arruinó buena parte del término de Valdealgorfa en un vano intento de aplacar la tormenta, mientras el párroco practicaba desde el campanario el exorcismo en estos casos. Hasta mediados del siglo XX, el ermitaño de Santa Bárbara se encargaba de tañer la campana de la ermita cuando empezaba una tormenta. También tocarla a las 12 y a las 15 horas, excepto los domingos, señalando el horario por el que se regían los agricultores.
Los incendios de las chimeneas eran relativamente frecuentes cuando acumulaban hollín en su interior, las campanas tañían sin cesar con toque especial llamado "tocá a foc". Los vecinos acudían llevando cántaros con agua desde las fuentes o la acequia. Un suceso anecdótico ocurrió a las diez de la noche del 25 de octubre de 1870 cuando se vieron grandes nubes luminosas en dirección del noroeste que provocaron la alarma en La Codoñera, las campanas tocaron a fuego creyendo que se estaba quemando la ermita de la Virgen de Loreto.
Los grandes acontecimientos políticos eran celebrados con el redoble de campanas. Así ocurrió el 7 de marzo de 1820, cuando el gobierno de turno mandó solemnizar con el redoble de campanas la proclamación de la Constitución de Cádiz de 1812.
El redoble de las campanas avisaba de la presencia de enemigos en tiempos de guerra. El 12 de enero de 1835, el coronel Nogueras firmó en Belmonte un decreto prohibiendo que ningún pueblo de cien vecinos proporcionara raciones ni auxiliara a fuerzas que contaran con menos de diez carlistas y de veinte si el pueblo era de doscientos habitantes y así sucesivamente, pero siendo de menor número debían" echar las campanas al vuelo".En 1938, la toma de poblaciones bajoaragonesas por los soldados franquistas era festejada con el redoble de campanas.
Las manifestaciones de alegría solían ir acompañadas del repique de todas las campanas.Así, par celebrar la llegada de la ansiada lluvia después de un período de sequía, el 6 de junio de 1864 se celebró una solemne procesión de acción de gracias a la que se sumó todo el pueblo de Torrecilla y fue acompañada del volteo de las campanas pequeñas. La toma de posesión de los vicarios, seguía hasta principios del siglo XIX un complejo ceremonial que incluía el toque de campanilla del coro con el repique de las campanas de la torre. 
Un toque triste de campanas era al que acompañaba al Viático y a los difuntos en los entierros. Este toque fue suprimido durante los períodos de epidemia como sucedió en las epidemias de cólera de los años 1865 y 1885.
La víspera de Todos Santos, en la "Nit de les Animetes"el tañido de las campanas durante la noche relevándose las personas llegaba a sobrecoger el ánimo.
Una misión del sacristán principal era tocar las campanas para acudir a misa en las Vísperas, al Rosario y a las oraciones de las seis de la mañana, al mediodía, y a las seis de la tarde.. Al sacristán le correspondía realizar los bandeos de campana de la noche del día de Reyes, la festividad de San Cosme y San Damián, para acudir a misa y anunciar la noche de la víspera, junto a los mozos, en la festividad de San Valero.
Los días de San Valero, Santa Águeda, San José, Jueves Santo, Pascua Florida, Ascensión, Corpus Cristi, Octava de Corpus, San Abdón y San Senén, Virgen del Pilar, Todos Santos, Asunción, Virgen de Loreto, Navidad, el bandeo tenía lugar a las doce del mediodía y alas siete de la tarde. Para San Antón, le ayudaban los quintos, para Santa Águeda, los casados y para San Valero, los componentes del Ayuntamiento.

         Artículo publicado en el programa de las fiestas patronales de San Cosme y San Damián en septiembre de 2014